El sopor veraniego me está impidiendo la asiduidad de antaño. Lo siento, las ideas que me proporciona la cotidianeidad, al momento me parecen burdas las deducciones a que me conducen las lecturas de la prensa, las noticias tanto radiofónicas como televisivas; en fin todo lo que la sociedad moderna viene infundiendonos en nuestros recalentados cerebros.
Este verano ha sido agotador. Primero,antes de comenzar - quince de junio - Expo2008, antes, muy poco antes, campeonato europeo de fútbol, luego olimpiadas; eso por un lado. Por otro, crisis económica; que nos explique el presidente el porqué de la recesión, la subida de precios, el coste del petróleo... así hasta el infinito. Después, libertad de un terrorista, accidente aéreo... y menos mal que el verano nos ha sido benigno en la carretera, que si no para que queremos más.
Lastima que con esto del descanso estival "El Roto" tiene vacaciones y nos priva de su ingenio, que algo nos alegraría su ácido humor, el "Forges" con su sicodelia, de vez en vez nos arranca alguna sonrisa, aun así vaya veranito.
Se nos ha cacareado una crisis, pidiendo comparecencias extraordinarias. Dando noticias alarmantes de falta de ocupación hotelera; pero resulta que esa Expo ha atraido a la ciudad del Ebro a varios millones de personas, que a una media de 28€; la entrada más corriente vale 35€, más el consumo que acarrea un día fuera de casa, en refrescarte, alimentarte y otros menesteres deben de pasar de 100€ persona adulta.
La grandeza levantina que nos ha traído un circuito urbano de la fórmula uno, y que según panorámicas no estaba vacío parece ser el coste era de 420 €.¿Donde está la crisis?
El próximo verano veremos que ya no habrá esos "eventos" ¿También habrá crisis?
Como faltan trecientos sesenta y cinco días y aun pasando rápido tardará en transcurrir y entonces cuando se vuelva de nuevo de vacaciones ya veremos.
Este año ya la hemos superado- ¡A!, no aun queda septiembre y la vuelta al cole - otra crisis y otra ocasión para hablar y no callar.