13.10.09

FIESTA NACIONAL



¿Quizás sea esto lo que nos pueda unir? Yo me niego



Hoy en el diario Miguel Ángel Aguilar, pone en antecedentes a los lectores de una serie de conceptos que en otros países tienen raigambre y suelen mover al pueblo.
Patria, bandera, ejército, himno nacional, y otra serie de cuestiones que en otros sitios conmueve a las multitudes, que cada año se vuelcan en los actos conmemorativos; de, por ejemplo la toma de la Bastilla; el día en que se proclamo la independencia del país, en fin acontecimientos pretéritos que lograron en un momento dado aunar voluntades y que son recordados anualmente, para gozo e interiorización de los ciudadanos que los disfrutan como si les hubiera tocado vivirlos.
¿Qué pasa en España, para que el día en que se pretende conmemorar una fiesta que una al pueblo, hay una serie de personas- si pueden calificarse así-, sin ofender al resto de las que componen el país, que se dedica a insultar a una de las autoridades de su país?
¿Que pasa en España que uno de los poderes del Estado - la judicatura- se pone ese estado al que representa por montera y hace una huelga?
¿Que pasa en España que un partido político - también base del Estado- cuando le vienen mal dadas por su negligencia y falta de moralidad, no duda en atacar a los estamentos de poder que lo persiguen - no al partido, si no a algunos de sus miembros- y con toda la hipocresía del mundo esconde sus vergüenzas como las avestruces debajo del ala y pretende que no pase nada?
Ese último de los ejemplos expuestos- el partido - sin embargo en una alarde de insensatez se opone a que en las escuelas se enseñe a los niños a ser ciudadanos.
Su tesis. Bien expuesta en Valencia; es que si la gente carece de valores, es mucho más maleable que si los tiene, y así cree que con esa política de amiguismos y favoritismos, tiene asegurado el poder.
Tenemos. La segunda generación de la maldita guerra, que hacernos escuchar y no sentir vergüenza de propalar los valores que con mano férrea se nos impusieron, y también los que en el fondo de la memoria se mantenían. Respeto a los demás- no el impuesto- sino al natural, al viejo ideario de la Europa anterior al desastre de 1945. Solidaridad con el otro. Trabajar por salir adelante como, entonces se tuvo que hacer. En aquel tiempo el consumo era imposible; ahora que es posible, hemos de enseñar la necesidad de la moderación, si no queremos acabar precisamente sin esos valores que dignifican al ciudadano. Igualdad, Libertad y Fraternidad.

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