MALOS HUMOS

Resulta, que cuando se dice… “Si la mierda tuviera valor… los pobres nacerían sin culo”, va a ser verdad.
Ayer los periódicos decían: Lluvia de millones para adquirir Co² en el Este.
El desarrollo de la noticia es que España, adquiere derechos de emisión de anhídrido carbónico, que pudiendo emitir los pobres de Polonia, Hungría, Chequia… se les compra ese derecho, para, en éste país, y supongo que no seremos los únicos…, poder incrementar o mantener, esas nocivas emisiones, y no pagar las sanciones que los grandes hombres del mundo mundial han acordado en Kioto. El objetivo creo yo es ver si esos pobres se quedan sin mierda definitivamente, y los ricos comprándosela se hacen más ricos todavía.
Ahora bien. Existe una contradicción. Si en los países pobres –menos industrializados – no se emite ese gas asfixiante, su vida será más saludable, por el contrario; donde se pague por emitir más y más anhídrido a la atmósfera, la vida será insoportable, cuestión esta que no sé si los gestores de esas compras tienen presente, o por el contrario; piensan en trasladar sus residencias a esos lugares que gracias a sus cabildeos poseerán una atmósfera respirable, a la vez que vigilan ese poder adquirido de oclusión del conducto rectal de esos países – fábricas – que a ellos les está produciendo pingües beneficios, mientras a sus pobres los está asfixiando y a los otros pobres; esos privados de culo, también, a éstos de hambre.
Para ser el primer día de este año en que me acuesto en mi diván y como lo hago en solitario no tengo el facultativo que me oriente, o me contradiga, a mi me es suficiente por hoy. A pesar de todo y siendo una lástima que haya dejado de fumar, espero que esa ambición de otros por ensuciar el aire no me afecte en demasía.

Incrusto unas fotografias sacadas de la red, de tres clases de humo. La del que yo he desistido de emitir, la que se emite desde esos paises emergente - en el delta del Parana - por una acción antigua, y que se empleaba en la edad media con fines bélicos y era el incendio del perímetro a conquistar, y una tercera tambien de guerra y actualísima que tambien se podrian comprar esos derechos de emisión; pero resulta que no, estos se venden. Tabaco envenenador, armas destructivas y tierras vírgenes para roturar. Todos estos humos nadie los compra. Solo se venden ya que son lucrativos, y el Co2 emitido parece ser no contamina.