24.11.07

¿DE QUE VAMOS ?










Resulta que ahora se mata o se muere en función de...





Unos envalentonados chulos; no se llega a comprender el objetivo; ya que no es creíble, o suena discordante. Un hombre de veinte años, soldado profesional, armado con un cuchillo de monte, en una trifulca absurda mata a un joven de diecisiete años, en una estación de metro.


Esto acaece en las proximidades del día veinte de noviembre.
Los medios de comunicación etiquetan el asunto. Un neonazi, mata a un antifascista.


Yo que al igual que el resto de los siete millones y pico de viejos que hay en España, y que escéptico como casi todos ellos puedo admitir, con muchas reservas, que un aprendiz de soldado profesional se pueda equiparar a un neonazi, ya que desde hace algunos años y por mor de un neo-liberal santurrón y de derechas - éste si que hiede - el ejercito español, al hacer profesional la clase de tropa, ha sido imbuido de la estética norteamericana de los marines.





¿ Pero es antifascista un crestudo mozalbete desarraigado? Que posiblemente no sabe; ya que en los textos escolares se soslaya el asunto, lo que fue el fascio y sus similares, nazismo, franquismo, y el resto de ismos aplicables a fatales apellidos, casi todos militares.

¿Por qué a las acciones de descerebrados ha de dárseles connotaciones que no tienen?
Pasó lo mismo con la muerte en las inmediaciones del campo de fútbol del paseo de la Castellana cuando otro descerebrado mató al seguidor de un equipo vasco de fútbol.

La sociedad en su conjunto y algunas partes de ella en particular; deberíamos dejar de poner etiquetas a las cosas tan a la ligera.

Para ser fascista hay que conocer la ideología de esas organizaciones, así como hay que conocerlas asi mismo para lo contrario y en este caso además las ideologías que son su antítesis. Además dejando de lado las ideologías, lo mejor es el sentido común y la civilidad; teorías que tampoco parece se enseñan en los textos escolares.





Esperaremos al próximo veinte de noviembre para que treinta y cuatro años despues de la muerte del fascismo en España; los medios de comunicación de nuevo, y en honor, no se sabe bien de quien o de que, buelvan a atribuir conotaciones políticas a unos acontecimientos atribuibles a la incuria social en cuanto a la educación de las generaciones que han seguido a aquellos felices y fanales, años setenta.





No espero que esta reflexión mía sirva para mucho, pero a mí me sirve de válvula de escape.



Entre todas estas ilustraciones hay fascistas. El creador del Fasccio y antifascistas, como Vázquez Montalban, Garibaldi habrá que incluirlo entre los progresistas y parte de la corporación municipal y autoridades de Zaragoza de los años cuarenta que cada cual las clasifique según sus preferencias.





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