6.11.07

UNA MELONADA



Hace ya mucho tiempo cayó en mis manos un folio reproducido por entonces hasta la saciedad en algunos foros en los que pretendíamos aprender algo de oratoria.

El título bastante ilustrativo era Cómo hablar dos horas seguidas sin tener nada que decir.

La explicación del texto es la siguiente: Comience por la primera casilla de la primera columna, (está dividido el folio en cuatro columnas y cincuenta y seis casillas) y a continuación lea cualquier casilla en cualquier orden, de la sucesiva segunda, tercera y cuarta columna. Continúe ya sin miedo pronunciando, con tono gardilocuente y pausas de efecto, cualesquiera casillas de cada una de las columnas correlativas. No intente mejorar la gramática cambiando <<>> por <>, y cosas así, pues entonces desmerecerá mucho ante sus oyentes. Al fin le resultará un espléndido discurso válido para cualquier tema político, económico, sociológico o sindical. Quizás nadie le entienda, pero tampoco nadie podrá disentir ni rebatir sus asertos.

La nota explicativa de este asunto dice: Esta caricatura del lenguaje político burocrático fue publicado por la “Revista de Varsovia” diario gubernamental de la capital polaca. Es una broma estudiantil que descubre lo vacío y absurdo que es el lenguaje oficial generalmente.

Queridos compañeros, la complejidad de los estudios de los dirigentes, exige la precisión y la determinación, de las actitudes de los miembros hacia sus deberes ineludibles.

Por otra parte, y dados los condicionamientos actuales, la realización de las premisas del programa, cumple un rol esencial en la formación, de las condiciones financieras y administrativas existentes.

De igual manera, el desarrollo continuo de distintas formas de actividad, facilita la creación, de las condiciones de las actividades apropiadas, del modelo de desarrollo.

No es indispensable argumentar el peso y la significación de estos problemas, ya que, el nuevo modelo de actividad de la organización, nuestra actividad de información y propaganda, de las condiciones de las actividades apropiadas, implica el proceso de reestructuración y de modernización, de los elementos generadores, del modelo de desarrollo…

¿Qué nos parece este discurso? ¿No lo hemos oído en infinidad de ocasiones? Si no con estas frases exactas; sí con la ilación de términos absurdos, dentro de un lenguaje coloquial, ya que el discurso se ha fabricado con palabras de cualquiera de los argots que ahora mismo se utilizan en cualquiera de los ámbitos de la vida diaria.

Mi reflexión se debe a los discursos actuales sobre la patria, la nación, la corona, la bandera; en fin de todo lo que a algunos les interesa hablar para distraer la atención de los verdaderos asuntos importantes para los ciudadanos.

La ilustración es adecuada, en cuanto al enlace hay que ir hasta el final donde se ve lo que se plantea.

1 comentario:

David Corellano dijo...

Completamente de acuerdo con tu opinión acerca de la mayoría de discursos e intervenciones que se escuchan por ahí. Eso sí, tendrías que haber escuchado ayer el de Alfonso Guerra en Zaragoza: IM-PRE-SIO-NAN-TE. En 20 minutos citó a Ovidio, Albert Camus, Huxley, Machado...... El auditorio casi se cae de espaldas al final... Un verdadero placer