¿EN QUÉ QUEDAMOS?

Día dieciocho de febrero. Tres de la tarde. Informativo de Telecinco. La NASA estudia la forma de destruir las auroras boreales. ¡Motivo! Interfieren en las comunicaciones de los satélites, que esa organización posee en el espacio.
Ahora está en cartelera un documental basado en las conferencias que por el mudo da el nuevo adalid del ecologismo Al Gore y hay rumores de todo tipo adhesiones y disensiones, fobias y filias en fin lo de siempre. Cuando alguien saca los pies del tiesto se expone a todo. Yo no siento especial simpatía por este norteamericano, como no la siento por casi ninguno de sus representantes políticos, puesto que salvo raras excepciones solamente sirven a los lobbys que los han colocado en el poder.

Este vicepresidente que no pudo llegar a presidente por unos escasos agujeritos ¿seria tan contundente en el poder?

¿Se puede defender el medio ambiente y gastar fortunas en la difusión de esa idea, escatimando ese capital para otras cosas más beneficiosas para la humanidad, como alimentar a las tres cuartas partes de seres humanos que pasan hambre en el mundo?

Podría ser creíble esa campaña si no fuera por la noticia hoy divulgada. Desde que el mundo es mundo, ha habido glaciaciones, calentamientos atmosféricos y desconocidas hecatombes medio ambientales, que como mucho están relatadas a modo de sagas y en época recentísima, por lo que la evolución del planeta Tierra es un misterio y esperemos que siga siéndolo, porque si no, si que habrá acabado el hombre sobre la Tierra.

Si el país que tiene el poder económico y unas extrañas estructuras administrativas, pretende deshacer un fenómeno atmosférico, que durante milenios ha sucedido; en aras de que nada interfiera en su sistema de poder y comunicación, por mucho que en torno a sí concite el señor Gore, podemos creerlo. A mi no me da confianza, sucede como con otras muchas cosas que se pretende cambiar pero que siempre continúan inmutables.

Además el medio ambiente es el que es. La humanidad se ha adaptado a vivir tanto en el frío extremo, como en el calor extremo - esquimales y tuaregs - ¿porque los demás hemos de sentir pavor a unos grados de temperatura más o menos?

Concluyo como en los relatos de intriga ¿Podrá el buen hombre Al con los lobbys que mantienen la investigación espacial? En próximas etapas lo veremos.